La oferta para alimentar a mascotas se ha diversificado en los últimos años, ofreciendo dietas que cubren todo tipo de necesidades. Esta especialización nos permite disponer de alimentos específicos para todas las edades, para animales con problemas de sobrepeso o que padecen algún tipo de trastorno, e incluso hay dietas veganas, naturales, etc. El problema es cuál de todas estas opciones elegir.

La dieta de nuestras mascotas es un tema que gana interés entre los propietarios, principalmente entre los más jóvenes. La razón es la estrecha relación que existe entre alimentación y salud. Por lo tanto, no extraña que desde hace unos años el objetivo de los propietarios sea conseguir una mejor calidad de vida para nuestros animales.
Las multinacionales que controlan el mercado de alimentación animal son conscientes de esta preocupación y por ello en la última década han surgido decenas de nuevas marcas y productos encaminados a cubrir todas las necesidades de nuestras mascotas.
Aunque a priori esto es positivo, dado que disponemos de una gran variedad de alimentos y formatos, el exceso de oferta hace difícil saber cuáles son los productos más adecuados, sobre todo cuando se desconocen las diferencias que existen entre ellos.
Por esta razón es necesario hacer un resumen de las dietas que se encuentran disponibles en el mercado, de forma que cada propietario tenga un mejor criterio a la hora de elegir la más aconsejable para su perro o gato.
Productos según formato
Hasta hace unos años disponíamos de piensos secos o extrusionados, las típicas “bolitas” y comida húmeda en lata, una mezcla de carne procesada y semitriturada. En este caso los piensos no han cambiado, pero la comida húmeda sí que ha sufrido una evolución radical.

Actualmente disponemos de dietas húmedas de muy diferente calidad, desde las latas de calidad baja de las marcas blancas, hasta enlatados de calidad premium con ingredientes aptos incluso para consumo humano. Las hay en trozos o en mousse, con caldos o gelatinas, en lata o en sobres y formuladas para distintas edades y estados de salud.
Además, desde hace unos años han irrumpido en el mercado las dietas naturales o “barf”, alimentos sin procesar y únicamente cocinados y conservados.
Productos según edad y estado de salud
Desde el principio la mayoría de marcas contaron con piensos para cachorros, adultos y perros sénior. Esta clasificación ha ido ajustándose conforme surgían los avances en alimentación animal y actualmente contamos con una gama bastante amplia.
El peso es otro factor que se tiene muy en cuenta. Por esta razón hay productos destinados a animales de alta energía con tendencia a adelgazar y otros para animales obesos o con tendencia a la obesidad. La esterilización tiene también una influencia directa sobre el peso, por lo que la mayoría de gamas cuenta con una línea para animales esterilizados.

La prevención y tratamiento de enfermedades también ha entrado en el terreno de las dietas, surgiendo alimentos específicos para problemas gastrointestinales, renales, alergias, diabetes o trastornos osteoarticulares. Todos ellos incluyen suplementos que ayudan a mejorar y mantener la salud de los perros que los padecen.
Los productos que más están evolucionando son los piensos para animales alérgicos o piensos hipoalergénicos. Se trata de dietas donde la proteína, el ingrediente que habitualmente causa estos problemas, está hidrolizado (cortado en trozos muy pequeños) de forma que el cuerpo no los reconoce como un peligro potencial y no desencadena la respuesta alérgica.
Productos según ingredientes y formulación
Este es el tercer pilar de la alimentación animal. Aunque la proteína principal de los piensos sigue siendo el pollo, desde hace unos años han comenzado a introducirse otras carnes (buey y ternera principalmente) y el pescado.

Con un mayor protagonismo de las proteínas surgieron los piensos bajos o libres de cereales, más conocidos como “low grain o grain free”. Se trata de dietas altas en contenido proteico donde las fuentes de hidratos de carbono proceden principalmente de los tubérculos, más digestibles y con menos problemas de intolerancias. En muchos casos van asociados a ingredientes con efectos antioxidantes.
Por otro lado, y debido al aumento de propietarios que no consumen productos de origen animal, desde hace relativamente poco tiempo disponemos en el mercado de piensos veganos donde la proteína animal es sustituida por proteína vegetal.
A día de hoy se continúan buscando nuevas fuentes de proteína sostenible, lo que ha hecho que comiencen a surgir algunas marcas que usan como ingrediente los insectos.
